Junto con la remodelación de las estancias existentes, la ampliación de la casa unifamiliar plantea la definición de un acceso que atraviesa el jardín japonés y una nueva galería-taller para realizar ikebanas. Concebida como un tejido traslúcido, entre la sala de estar y el comedor de la vivienda se ha construído una pantalla con delgados cables de acero que pemiten independizar ambas zonas sin perder continuidad espacial.