La intervención en la costanera de Paraná se define como resultado de una operación de estabilización de barrancas y defensa costera que fue determinante del proyecto arquitectónico. La construcción de un tramo central de costanera implicaba responder a los requerimientos estructurales de la obra de defensa, articular el Parque Urquiza con el río y generar una imagen para ese sector costero. El uso de hormigón fue una opción que acompañó el largo proceso de la obra en virtud de sus características de durabilidad, resistencia y estética acorde a la época.